En la película Regreso al Futuro 3, el Doctor Brown insiste varias veces a Marty McFly: “El futuro no está escrito”, en base a la idea de que todo lo que modifiquen en el pasado reconstruirá la historia y nunca será igual. Mientras que la primera película es un elogio a la máquina del tiempo, a partir de la segunda su inventor empieza a demonizarla, deseando su destrucción cada vez con más ímpetu. En la tercera película solamente desea cambiar mínimamente el pasado para reparar el presente y, por tanto, el futuro. El fin es desmantelar el Delorean una vez lleguen a un presente aceptable.